¡Mira que ha costado, yo no sé la cantidad de intentos! Pero ayer estos cuatro sensibles a la fuerza fueron a rescatar a Romund y escalaron, pelearon, perdieron sus créditos por el cauce de un río y sí, lo lograron.
Nos lo pasamos muy bien y nos reímos un montón, ¡como no podía ser de otra manera, jugando al juego de rol de la saga más grande de todos los tiempos!
Lo próximo que haga de SW va a ser a D6, el juego cuyas fotocopias fueron fuente de muchas aventuras imaginarias de pequeño y que tantas veces manoseé en la librería Ópalo hasta que al final lo pude conseguir, y ambientado en La Nueva República (lo que estamos viendo en Ahsoka, The Mandalorian y demás series). Me apetece mucho, primero, meterme en esa parte de la historia, con todas las cosas nuevas que están saliendo, y segundo, volver al mítico D6 (tal vez el Redux, que me lo regaló Andrés y ya lo llevé a unas jornadas).
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